sábado, 26 de diciembre de 2015

Un año en construcción

Cada año comienza con un nuevo blog y cada nuevo blog lo hace con un nuevo lema. Hay años en los que el lema se presenta solo sin llamar y otros tengo que buscarlo. Normalmente son deseos o esperanzas para el nuevo año que comienza. Este año es de esos en los que tengo que buscarlo; de hecho ya he empezado ... y casi que ya he terminado. Ya tengo el lema: Un año en construcción y el lema "gráfico", si lo hubiera, sería este.
Procedo pues a cambiar el título de la entrada que originalmente era "¿Cuál será el nuevo lema? al título definitivo: "Un año en construcción".

Hablando de años en construcción, ya se sabe que todos lo están y por ese mismo motivo tuve algunos años en los que aprovechaba las Navidades para echar la vista atrás, contemplar lo conseguido durante el año y establecer propósitos/pronósticos para el siguiente.

Si me preguntan por este 2015 al que ni una semana le queda, quizás lo definiría como el año de la independencia. El año en el que yo y nadie más que yo, he trabajado en cosas que son para mí aunque no necesariamente desde el punto de vista egoísta. Es el año en que he estado de baja por un período superior al par de días que era, afortunadamente, mi récord. El año que he sido electricista, jardinero y hasta programador. Un buen año, para qué voy a decir lo contrario.

Por ponerle alguna pega, ha sido el año en el que me he dado cuenta de que los achaques físicos que sentía al jugar al fútbol no eran sino las primeras de esas goteras que van apareciendo con la edad. Bien pudiera decir que este ha sido el año en que me he hecho viejo :-). Sin embargo, la forma física no es mala y si tengo la fuerza de voluntad de perder dos o tres kilos más tras las navidades, creo que puede ser todavía mejor.

Y con esto empezamos el listado de deseos para el 2016. Lo empezamos y lo acabamos porque el listado esta vez va a ser corto. A nivel general deseo que el 2016 acabe mejor de lo que lo ha hecho este 2015, sin tanta política ni políticos de tres al cuarto acaparando las portadas y las tertulias. Ya sé que es complicado pero por pedir ...
A nivel personal me gustaría que el 2016 acabara con "mejoras" respecto a como lo hace este 2015. Es decir, no que sea mejor sino que se siga mejorando. Un matemático pediría que la primera derivada fuera positiva. Yo no me atrevo a pedir tanto y no porque tema que la gente no lo entendiera, lo que temo es no entenderlo yo mismo :-).

C: Brindábamos recuerdo: Feliz Dos Mil Quince,
L: Un tequilita, Cuate; por el amo y la ama,
C: Un tequilita como este, amigo Lince,
L: Uno solo uno y cada mochuelo a su cama,

El ama escucha un brindis ¿Cuate o Lince?,
A: ¡Los perritos a dormir!; ¡No perreéis!
L: No hay debate, se acaba el Quince.
C: Con sal y limón, ¡Feliz Dos Mil Dieciséis!.

Un saludo, Domingo.

sábado, 19 de diciembre de 2015

Me vuelven a dar ganas de votarles

Como viene siendo habitual, sigo las campañas desde la distancia. Se puede decir que en vez de leerme el libro, espero a que salga la película. O incluso mejor, el audiolibro porque lo que escucho suelen ser los resúmenes de la radio.

No vi el tortazo figurado del debate del lunes ni el no figurado del miércoles. No los vi y no los he visto. Sí que he escuchado los calificativos periodísticos y aquellos que consiguieron pasar a la inmortalidad como esos "indecente" y "Ruiz, ruin y mezquino".

Por cierto, "indecente" no me pareció un insulto. Me pareció un calificativo despectivo. No muy diferentes me parecieron los de la réplica aunque sí algo. Yo los hubiera traducido por:
- Usted es indecente por liderar un partido con auténticos cánceres, más que problemas de corrupción y no hacer nada al respecto durante años y años
- Usted es ruin y mezquino por hacer lo mismo en el suyo en el tiempo que lleva y por criticarme a mí con la única intención de ganar votos. Político, que es usted un político.

He sustituido el "Ruiz" de la segunda parte por político porque eso sí que es un insulto. No Ruiz, evidentemente. Por cierto que tampoco critico el desliz. A Zapatero ya le pasó cuando la economía del lenguaje convirtió un "PARA Favorecer, para apOYAR" en un "PARA FOLLAR". El "RUIn, meZquino" por "RUIZ" me parece equivalente.

Finalmente, quizás pienso que no he seguido la campaña porque tenía mi voto decidido hacia Ciudadanos, al considerarlo como el voto útil tras la ausencia de UPyD. De hecho, me hubiera gustado que Ciudadanos hubiera sido la gran sorpresa, quedara segundo y tuviera posibilidades de gobernar. Y tuviera posibilidades de gobernar un partido que no fuera ni PP ni PSOE.

Lamentablemente, según las encuestas, no podrá ser. Y también según las encuestas, UPyD está al borde de la desaparición. Ojalá pueda sacar al menos un escaño por Madrid. De tener posibilidad de sacarlo por Málaga, creo que les hubiera votado. Qué gran pena que no entendiera en su momento lo que fuera que hubieran debido entender. Quizás seguir con sus ideales pero que Rosa Díez hubiera dado un paso atrás antes. No sé.

Mañana sabremos más acerca de nuestro futuro próximo y de los pactos que los candidatos, como buenos políticos, nuevos y viejos, se han cansado de rechazar y ahora abrazarán. Y luego querrán que los veamos con buenos ojos. Mientras tanto, cada vez que escucho una entrevista con uno, me entran ganas de votarle. Hasta que me acuerdo de lo anterior y similares.

Un saludo, Domingo.

sábado, 5 de diciembre de 2015

Cambio

Creo que ha sido esta semana cuando tuvo lugar la cumbre sobre el cambio climático. Hace años Mariano Rajoy tenía un primo que no creía en él o al menos era escéptico. Yo lo era también, incluso si el hombre tenía influencia, confiaba en el rápido desarrollo de una tecnología que pudiera revertir la tendencia. En mi mente veía unos plancton genéticamente modificados para hacer una fotosíntesis mucho más efectiva. Parece ser que estaba equivocado en varias cosas.

En primer lugar la ciencia ya ha podido determinar con cierta certidumbre (sigma=1, creo) que las actividades del hombre sí influyen en el calentamiento global. Es curioso porque ese fue el nombre original y de ahí se pasó al cambio climático pues parecía ser bastante más fácil de probar que el clima estaba cambiando (dentro de lo cambiante que de por sí es) a que hubiera una temperatura media en la Tierra superior cada año.

No solo eso, parece ser que las acciones que se puedan tomar requerirían muchos años para tener un efecto tangible por lo que el calentamiento global de grado y medio que se conseguirá en unos años debido a las emisiones lanzadas hasta el momento parece ya más que seguro y el objetivo de dos grados puede ser fácilmente NO alcanzable a poco que tardemos más de lo debido.

En segundo lugar parece que también me equivoqué en la tecnología. No se quiere una fotosíntesis natural mejorada sino una fotosíntesis artificial. Mi ignorancia me impide darme cuenta realmente de cuán maravilloso podría ser conseguir dominar de forma artificial un mecanismo que podría ser clave no solo en este sino en muchos otros retos futuros.

Esperemos que pase, esperemos que sea pronto y esperemos que nuestros hijos no paguen nuestros errores, al menos los míos que el que creyera en el cambio climático hace unos años tendrá la conciencia algo más tranquila.

Un saludo, Domingo.

El cambio climático (Relato)

Cuando las aguas no acaricien los cauces,
Cuando los ríos se desangren sin ganas,
Cuando no haya ni presas ni fauces,
Ni ladren los perros ni croen las ranas.

Cuando los buenos estén en la cárcel,
Cuando los viejos no paren en casa,
Cuando los niños de teta se amansen,
Y las mesas sean tablas muy rasas.

Cuando la flor marchita esté en boga,
Dicen que entonces acabará esa plaga,
La plaga de la muerte por partes y aparte,
Viajes de ida, sin vuelta: de la Tierra A Marte,
La plaga del hombre, que cierra la saga,
Y se destruye como quien busca la soga.

Un saludo, Domingo.

sábado, 28 de noviembre de 2015

Hay algo que quería decir

Llevo un par de semanas acordándome el lunes o el martes de algo que me gustaría comentar en el blog. Hasta ahora, llegaba el sábado y se me olvidaba que quería comentar algo. Hoy no se me ha olvidado, lo que se me ha olvidado es lo que quería comentar :-).

Intentando hacer memoria ... no creo que fuera sobre política o las elecciones o Cataluña o la actualidad. No creo que fuera sobre el trabajo, las nuevas instalaciones, las nuevas responsabilidades, etc. No creo que fuera sobre comida y los fallidos experimentos en repostería.

No creo que fuera sobre ese buen estado general y esas molestias particulares en la cadera cuando juego al fútbol. No creo que fuera sobre mis recién descubiertas habilidades como electricista. No creo que fuera sobre ninguna de las cosas que ahora mismo se me vienen a la cabeza.

Solo estoy seguro de una cosa y es que hay algo que quería decir. La próxima semana, quizás.

Un saludo, Domingo.

sábado, 21 de noviembre de 2015

Un crowdfunding

Eso es lo que voy a tener que hacer. O eso o que mi jefe me doble el sueldo. Casi mejor lo segundo. A ver si me acuerdo el lunes de proponérselo :-). En fin, puedo llorar con un ojo así que si hay algo que ni puedo ni debo, es quejarme.

Un saludo, Domingo.

sábado, 14 de noviembre de 2015

Los inhumanos, enemigos de todos

Hacemos mal en llamarles animales o bestias. Acertamos cuando hablamos de sinrazón, barbarie, terror o cobardía. Cuanto más evolucionada está una vida, más frágil es y más debería hacer por intentar preservarla, tanto la suya como las de los demás. Basta ver la tierra de un jardín, de una jardinera o una maceta. A poco que esté al aire libre, una semilla, una hierba, calificada por nosotros como mala simplemente porque no es de nuestro gusto, germinará y la vida brotará.

Los mamíferos que solemos tener como mascotas no se reproducen casi por generación espontánea pero también tienen una resistencia mayúscula y encima son más humanos que los que empuñan un Kalashnikov.  Un perro se puede hacer un corte profundo o puede ser abierto en canal, operado y vuelto a cerrar que al par de días, si no al día siguiente, estará bien sin necesidad, casi, de cuidados en la herida. A mí una operación relativamente menor me tuvo más de dos semanas con puntos y curas diarias y un mes de baja laboral.

Subiendo (teóricamente) en la escala evolutiva, solo los padres responsables saben cuánto cuesta criar un hijo. Ayer, cientos de padres vieron como un fanatismo impropio de los tiempos que corren dieron por tierra, cuando no bajo tierra, con todos sus esfuerzos. Solo me puedo imaginar una cosa más triste que acabar tus días ametrallado por un fanático, ser el fanático que ametralla o quizás haya otra más, ser el padre de uno de esos fanáticos y contemplar el hecho con orgullo.

Hará unos meses escuché en la radio que estábamos librando la tercera guerra mundial. No lo había pensando hasta entonces pero me di cuenta de que así era. Si fuera una persona religiosa, hoy mis rezos irían en avión hacia París y mañana también en avión hacia Siria, Iraq, ... pero en un caso a consolar a las víctimas y en otro a dar aliento a las bombas que caen sobre los asesinos. Es muy triste, lo sé, pero es cuestión de evolución. No quiero imaginarme que la especie más apta para vivir en los mejores años que nunca haya tenido la humanidad sea la especie terrorista.

Un saludo, Domingo.

domingo, 8 de noviembre de 2015

La carretera, enemiga de los animales

Hará unos veinte años que viví mi primer atropello de animales. Era en Ronda, conducía el que entonces era novio de mi prima, iba por la calle, un perro salió al paso y ...
Mientras el involuntario canicida preguntaba por todas partes para ver si se podía hacer algo con el animalito, aunque solo fuera terminar antes con el dolor, el dueño miraba cómo agonizaba y decidía que una vez muerto lo echaría en tal o cual contenedor de basura. Es posible que quisiera a su perro, pero como se quería antes, hace años, a los animales en las casas, un cero o una gallina, por ejemplo. Se les podía coger cariño pero la pena por su muerte duraba entre poco y nada.

Hará unos siete morían, con escaso tiempo de diferencia, Tina y Kiteretxu , Kite, o Kite y Tina. Perrita y gatito, gatito y perrita porque además ambos eran unos cachorros. Un pelín mayor el gato. Desde entonces, cada vez que veo un animal atropellado, no siento el insondable pesar que sentiría mi mujer si lo viera pero sí que lo comprendo.

Ayer vi a un perro que estuvo cerca de acabar atropellado y quién sabe si no lo acabará. Lo único peor que eso es que me acusaran a mí de abandonarlo. Manda...

Pongámonos en situación. Voy por la autovía y al llegar a un viaducto de unos 300 ó 400 metros de ancho, veo un perro más bien pequeño corriendo por el arcén. Era un perro atigrado, del estilo pitbull de esos que tanto gustan a algunos. Podía parecerse a este de la derecha.

Así pues, voy reduciendo la velocidad aun sabiendo que eso me pone a mí en peligro y una furgoneta que va detrás de mí hace lo propio. Afortunadamente parecía que no habría riesgo de colisión. Al llegar a la altura del perro, este se asusta y pasa del arcén a la carretera, justo a la altura de mi rueda derecha. Freno más, incluso pito, perdón, acciono el claxon y el perro vuelve al arcén. Duda durante unos instantes si seguir hacia delante, hacia atrás, se asoma por la barandilla manifestando su intención de abandonar la carretera pero el vacío lo disuade.

Mientras, yo paro en el arcén, las luces de emergencia activadas y me quedo en el coche dudando si abrir la puerta e intentar cogerlo o no. Son más de uno y más de dos las personas que han muerto atropelladas por un conductor distraído mientras salían del coche para cualquier menester. Lo sopeso un par de veces pero siempre viene algún coche así que no termino de atreverme. Son unos cuantos segundos, los mismos que necesita el perro para darse la vuelta y empezar a recorrer la centena de metros que le separaba del inicio del viaducto.

Miro por el retrovisor como el perrito, un año le calculo yo, con su collar rojizo se va haciendo más pequeño y desaparece en una curva cercana a lo que yo interpretaba como el inicio del viaducto. Dejo de verlo y deduzco que ya lo ha  abandonado y se encuentra relativamente a salvo. Espero por si acaso y tras un tiempo prudencial reemprendo la marcha. En total habrían pasado entre dos y cinco minutos. Probablemente no más de tres pero se me hicieron eternos.

Durante todo este tiempo, una furgoneta, probablemente la que iba detrás de mí había permanecido parada también en el arcén con la doble intermitencia puesta. Suponía que pensaban que estaba en problemas y habían parado por si necesitaban ayudarme. Los adelanto a escasa velocidad. Inician también la marcha y veo a un hombre y una mujer, el hombre al volante. Aunque sería más exacto decir que tenía una mano en el volante porque con la otra manejaba un móvil con el que me hacía una foto. Al menos hacía con esa mano el gesto característico de cuando se saca una foto.

Pienso que lo mismo no querían ayudarme sino que están cabreados porque tuve que parar de forma súbita pero no le doy mayor importancia. Cojo el desvío correspondiente y veo que la furgoneta me sigue. Paso una rotonda y me sigue. No solo me sigue sino que me echa las luces y vuelve a sacar el móvil. Eso sí que no lo entiendo. Así pues, en la siguiente rotonda paro en una de las escapatorias y la furgoneta para a mi lado.

No recuerdo muy bien la conversación pero no debió ser muy diferente a lo que voy a contar. Básicamente me preguntaron por el perro y si lo había abandonado. Les dije que tengo ocho perros por lo que ese extremo era altamente improbable. La señora, que bien pudiera ser la madre del conductor, afirma que el perro ha salido de mi coche. Les intento explicar lo que han visto y el conductor me dice que me quede ahí que ahora se lo voy a tener que explicar a unos compañeros suyos que van a llegar. Él, interrumpiendo la circulación, es increpado por otros conductores por lo que para un poco más adelante.

Me bajo del coche, llego a su altura y se vuelve a reproducir la conversación. El conductor, con un lenguaje que describiría como "profesionalmente correcto" da la sensación de trabajar en el mundo de la seguridad e insiste en que no tengo que explicarle nada sino que tendré que explicarlo a sus compañeros. Le pregunto si es agente y me confiesa que no, que es un empleado de seguridad aunque no aclara de qué y que tendré que explicarle todo a sus compañeros. En ese momento le comento que él también tendrá que explicar por qué me ha fotografiado mientras conducía y entonces se pone nervioso y lo niega. Sí que admite haber llamado para reportar ... lo que sea. Le hago ver que esa llamada es incluso peor que la fotografía pero vuelvo a insistir en que lo que han visto no es sino a mí intentando evitar un atropello, luego dudando si coger al animal y por último yéndome al no volver a verlo.

Entonces me pregunta por qué no he llamado para avisar del perro en la autovía. Le respondo que tiene razón, que podría y probablemente debía haberlo hecho pero que no caí. Bastante preocupado estaba con que no me atropellaran en caso de decidirme a salir pero, siendo verdad eso, de ninguna manera iba a permitir que dijeran que yo había abandonado un perro.

En ese momento ocurrió algo llamativo. Él niega haber dicho nada, algo que posiblemente era cierto porque lo había asumido, lo había dado a entender pero creo que no lo había dicho. Yo comento que alguien había dicho que el perro había salido del coche pero no recordaba quién. Y él entonces dice: "Ha sido ella que habla demasiado". Me quedo asombrado por el efecto de una frase tan corta. En primer lugar ese "ella" me induce a pensar que no es su madre. ¿Quizás su suegra?. Lo de que hablara demasiado y el tono en que lo dijo me hizo decantar por esa segunda opción o al menos tenía claro que la opinión que tenían él de ella (y quién sabe si viceversa) era mejorable, por ponerlo de forma suave.

La cosa se serena, parece que mi actitud los ha convencido de que no soy un abandonador de perros y en un momento dado él llama de nuevo. Parece contradecirse de su opinión anterior al decir que le había parecido, había interpretado ... pero que probablemente era solo un perro abandonado por tal zona. Poco después se va pero no sin volver a insistir (vuelta la mula al trigo) que me quede para que los que fueran a llegar, puedan preguntarme/interrogarme. Amablemente le digo que no pienso quedarme, que le doy mi número de teléfono, puede llamar si quiere asegurarse de que es el número legítimo (algo que no hace) y que lo mismo que voy a relatar en una rotonda lo voy a hacer hablando por el móvil en mi casa, una vez se me haya pasado el mal rato. Esta última parte es posible que no la dijera :-).

Y así ocurre, al menos parcialmente. Quiero decir, ocurre que vuelvo a mi casa y se me pasa el mal rato pero en ningún momento me llaman. Tras el mal rato, queda la preocupación por el perro ¿quizás escapado de alguna finca cercana?, la gratitud a quien se preocupa tanto por un perro como para llamar y avisar de ello y otro sentimiento de más difícil expresión para quien presupone que eres un maltratador de animales, tarda en entrar en razón e incluso cuando aparentemente lo ha hecho, no se disculpa por ello ni lo explica.

Un saludo, Domingo.

sábado, 31 de octubre de 2015

Altibajos deportivos

Altibajos es cuando me doléis
La cadera, la cintura o las rodillas
También cuando el fútbol, ya sabéis
Inunda de molestias y esas cosillas.
Balompédicos achaques que se paran,
Al pasar las noches de puntillas,
Jueves noche y viernes reparan
Ordenan, arreglan y ya se han ido.
Sábado por la mañana. Hay partido.

Un saludo, Domingo.

sábado, 24 de octubre de 2015

No estaba solo, volvió al futuro

En los últimos meses he escuchado hablar varias veces de Monterroso y su famoso dinosaurio. Ignoro si fue él el que inició el género, el que le dio fama o el que contribuyó a ella pues parece que las seis palabras ya llevan tiempo dando vueltas. Lo he leído hoy en Jot Down: http://www.jotdown.es/2015/10/vivieron-y-murieron-en-seis-palabras/

El caso es que parece que hay gente que tiene cierto gusto por este pseudo haiku y hasta cuentas de twitter dedicado a ello que he empezado a seguir https://twitter.com/enseispalabras

Por mi parte y antes de encontrar esta cuenta de twitter, ya me había decidido por esas seis palabras que componen el título. Y por lo que veo, haciendo referencia al tiempo, algo que no sorprenderá en el blog, a los viajes en el tiempo, algo que no sorprenderá esta cinematográfica semana y además haciendo referencia a una palabra que está presente en cinco de los últimos seis nanorrelatos (si no recuerdo mal ese era el nombre) del tuitero.

Ciertamente, contar una historia en seis palabras requiere expresar por un lado el paso del tiempo y por otro manifestar una situación de origen indefinido y con un final por determinar. No sé si mucho más o no sé si mucho menos. Algunos pobres intentos por explicar cómo crearía yo tales nanorrelatos serían:

Llamó la atención, en seis palabras.
Cerró ahora, abrió pasado y futuro.
Contó poco pero dejó muchas incógnitas.
Cuando acabó, tocó el turno del lector.
Cada palabra contó; seis casi todo.
A veces un tuit era demasiado.

No sé si lo he hecho bien. Lo que sé es que había puesto las frases en presente y no me daba la sensación de que en ninguno de esos casos lo he hecho bien. Lo cambié a pasado y ya sí me dio la impresión de haberlo hecho mejor. Mirando de nuevo al tuitero, compruebo que el uso del pasado suele ser también una constante. Claro, como le lees ahora, te preguntas irremediablemente qué ha pasado después. 

En este sentido, el ejemplo que viene en Jot Down es mejor. De memoria, sería algo así como un anuncio de venta que traducido libremente al español podría quedar como: Vendo carrito de bebé. Nunca usado.

Claro, usa el participio de pasado, no el pasado. Usando el presente se me ocurre acudir a los sentimientos. Algo así como:
Pienso en ti y no lloro.

O en futuro:
Lo conseguiré, pase lo que pase.

Bueno, quizás no sea la mejor entrada, quizá sea un tanto vacua, pero me ha gustado así que me despido con el último nanorrelato:

En seguida vuelvo.
Un saludo, Domingo.